Prueba cómo utilizar Travelfinder_® a través de diferentes canales de comunicación

Recuerda, señora, que Granada es el país más hermoso del mundo; Recuerda que uno respira por el día todo lo que el sol extrae de los perfumes de la naranja, violeta, rosas y del jazmín siempre verde y florido, y por la noche todo lo que un cielo azul, salpicado de millones de estrellas, puede sacudir de frescura en el suelo; que uno se pierde a cada paso por senderos de boj, lentisco y sicomoros, a través de estas hendiduras de las cuales parece ver el rostro sonriente de Dios que ha bendecido a este país encantado; que tenemos, si miramos a Granada desde las terrazas del Generalife, a su izquierda, las torres cobrizas del palacio que lloraba Boabdil; a su derecha, el Albaicín y sus nidos bohemios escondidos entre aloes y cactus; frente a ti, un valle verde y fragante, que se dirige hacia un horizonte azulado, embelleciendo una cadena de montañas que parecen el cinturón que el celoso Señor puso como muralla alrededor de la ciudad, a la que sus habitantes dieron la forma y el nombre de la fruta más dulce; y finalmente, detrás de nosotros, la Sierra Nevada, una inmensa fortaleza granítica, almenada con plata mate y pulida. Todas las maravillas que habíamos deseado antes de verlas, y adoramos después de haberlas visto.

Alexandre Dumas - Impressions de voyage: De Paris a Cadix (1847)